Arte y poesía: vigencia de toda expresión lúdica, gesto o acto non servil en tiempos tan obscuros como los actuales. Disertaciones sobre el culto añejo de ciertos antagonismos: individuo vs estado, ocio y contemplación vs labor de androides, dinero vs riqueza. Ensayos de libre tema, sección sobre ars poética, un muestrario de literatura universal y una selección poética del editor. Luis Alejandro Contreras Loynaz.
Si en Venezuela estilamos ser toderos, ese envite de torear la vida en cuanta empresa se nos plante ante la vista, yo debo decir que he sido -y acaso aún soy- un fervoroso nadero, suerte de lance para nadar en las enaguas de la susodicha. Pues en lugar de ser un profesional en todo, he sido un amateur en nadas; en el más feliz de los casos, un entendedor, siempre a la chista callando. Las naderías suelen causar gran fascinación sobre las almas distraídas, entre las que me incluyo, y no sé que hado les haya legado su encanto a las primeras. Y, aunque cursé más de cien créditos en la Escuela de Letras de la UCV, nunca me mortificó el comprobar que ese sistema de jerarquías con que el hombre gusta de mortificarse la carne, también hubiese ganado espacios en ese querido recinto y que, en virtud de ello, hubiese materias que disfrutaban de cierta prelación sobre otras. Iba por puro gusto. Nada hay como explayarse. El resto es aburrido y desmesuradamente empalagoso. Por otra parte, ¿quién no tuvo, alguna vez, que pasar por el trance de mancillarse las manos al hacer algún oficio? Pocos, muy pocos.
Tendría yo 18 años cuando en mis manos cayeron las cartas de Rilke a Frank Kapus. Y me quedé para siempre enlazado a la palabra de Rilke. En una de esas cartas le decía explícitamente a Kapus que se escribe por necesidad. Me sentí revelado e inmediatamente identificado con el poeta. Yo parto de esa base. Y comparto su opinión de que uno no debería escribir nada si no siente una indoblegable necesidad de hacerlo. Cuando uno está en vena, escucharå, hablará, escribirá. Cuando uno no está en vena, callará, pero seguirá escuchando...
lacl,
Bitácora en acuario
28 / 01 / 2023
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Somos extranjeros, bien lo sabemos, en este teatro de asombros.
Pero hay dos modos de asumir nuestra extranjería: como el paria espiritual que, ante el Enigma, prefiere mutilarse los sentidos o como el desamparado que bendice cada nueva escena que el teatro abre para él.
Quizás me vuelvo un tanto hierático cuando me siento al lado de Ryokan, para entonar su enunciado de que “sus poemas no son poemas”. Comulgo al cien por cien con ello y digo: mis poemas no son poemas… Aun cuando no quiera abusar del ejercicio de la negación. Acaso porque lo que uno desea es que sea la vida y no el poema lo que se represente en las palabras. Tamaño abuso de parte de quien tiene que arrodillarse ante la palabra para pespuntear, aunque sea, un perfil… Pero en un mundo signado por los excesos del egotismo, creo que quien se sienta tocado por la poesía, debe primero que todo poner en duda la importancia de encarnar un papel como tal cosa o tal otra. Acaso sea preferible andar el camino por los senderos de la puesta en duda.
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(madrugada, 10 de febrero, 2009)
Hay una breve meditación de Ryokan -poeta japonés que abrió los ojos cuando mediaba el siglo dieciocho y los cerró cuando terciaba el diecinueve- que, de una manera indirecta, tangencial, sugerente y no carente de belleza, acrisola lo que es mi posición ante el vivir:
La mort des amants (Charles Baudelaire, in Les Fleurs du mal) - Léo Ferré
Nous aurons des lits pleins d'odeurs légères,
Des divans profonds comme des tombeaux, Et d'étranges fleurs sur des étagères, Écloses pour nous sous des cieux plus beaux.
Usant à l'envi leurs chaleurs dernières, Nos deux cœurs seront deux vastes flambeaux, Qui réfléchiront leurs doubles lumières Dans nos deux esprits, ces miroirs jumeaux.
Un soir fait de rose et de bleu mystique, Nous échangerons un éclair unique, Comme un long sanglot, tout chargé d'adieux ;
Et plus tard un Ange, entr'ouvrant les portes, Viendra ranimer, fidèle et joyeux, Les miroirs ternis et les flammes mortes.
Kathleen Raine. Una poeta en cuya voz suena el eco de Anima Mundi. Dejamos acá un poema traducido por Revol para su antología de poesía inglesa. También dejamos otro, titulado Change, el cual intentaré traducir a nuestra lengua para agregarle aquí. (*) Por ahora dejaremos este par, algunas estampas y un speech de la poeta, NATURE, THE HOUSE OF THE SOUL (Naturaleza, la casa del alma). Salud, lacl.
DE MUJER A AMANTE
(Woman to lover)
Kathleen Raine
Soy fuego
Aquietado en agua,
Una ola
Que se alza del abismo.
En mis venas
La marea regida por la luna se levanta
En un árbol de flores
Esparcidas en espuma del mar.
Soy aire
Atrapado en una red,
El pájaro profético
Que canta en un cielo reflejado.
Soy un sueño antes de la nada,
Soy una corona de estrellas,
Soy el modo de morir.
Según la traducción de E. L. REVOL para Ediciones Librerías Fausto, Buenos Aires 1974.
CHANGE
Kathleen Raine
Change
Said the sun to the moon,
You cannot stay.
Change
Says the moon to the waters,
All is flowing.
Change
Says the fields to the grass,
Seed-time and harvest,
Chaff and grain.
You must change said,
Said the worm to the bud,
Though not to a rose,
Petals fade
That wings may rise
Borne on the wind.
You are changing
said death to the maiden, your wan face
To memory, to beauty.
Are you ready to change?
Says the thought to the heart, to let her pass
All your life long
For the unknown, the unborn
In the alchemy
Of the world's dream?
You will change,
says the stars to the sun,
Says the night to the stars.
(*)
(*) Post scriptum, lacl, madrugada del día de los santos inocentes, 28 de diciembre de 2023. Agrego mi versión a nuestra lengua de este hermoso poema.
CAMBIA
Kathleen Raine
Cambia
Le dijo el sol a la luna,
No te puedes quedar.
Cambia
Le dice la luna a las aguas,
Todo está fluyendo.
Cambia
Le dicen los campos a la hierba,
Son tiempos de siembra y cosecha,
Heno y grano.
Tú debes cambiar dijo,
Le dijo el gusano al retoño,
Aunque no a una rosa.
Los pétalos se desvanecen
Que las alas pueden elevarse
Llevadas por el viento.
Tú estás cambiando
Le dijo la muerte a la doncella, tu lívida faz
A la memoria, a la belleza.
Estás preparado para cambiar?
Le dice el pensamiento al corazón, para dejar que ella pase,
Un fabuloso libro sapiencial, escrito hace más de dos milenios, cuyos enunciados versan sobre la comprensión de los misterios del Tao. El dicho 98 que acá transcribimos, en mi humilde opinión, bastaría por sí solo para confirmarlo o, al menos, ejemplificarlo.
Salud, lacl.
Lao Tse la dijo:
El camino puede ser utilizado para la debilidad o para la fuerza, para la flexibilidad o para la firmeza, para la pasividad o para la actividad, para la oscuridad o para la luz. Puede ser utilizado para abarcar el cielo y la tierra, y puede ser utilizado para responder a los tiempos sin convenciones fijas.
Conocer es algo superficial, no conocer es algo profundo. Conocer es externo, no conocer es interno. Conocer es burdo, no conocer es delicado. Conocer es no conocer, no conocer es conocer.
¿Quién sabe que conocer es no conocer y que no conocer es conocer?
El camino no puede ser oído; lo que es oído no es. El camino no puede ser visto; lo que es visto no es. El camino no puede ser dicho; lo que es dicho no es. ¿Quién sabe que su forma es no forma? Por ello, cuando todo el mundo sabe que lo bueno es bueno, esto no es bueno. Quienes saben no dicen, quiénes dicen no saben.
(Lao Tse
WEN-TZU
Comprensión de los misterios del Tao)
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iqué belleza! se me escapa la frase, luego de leer en voz alta y en el fondo o en el eco de la más silenciosa y solitaria noche esta enunciación...
A estas alturas del partido, para decirlo de manera coloquial, yo todavía poseo una buena cantidad de películas en formato VHS. Por fortuna, cuento con un equipo en buen estado, en el cual pueden reproducirse estas películas. Hace pocos días, reacomodando un mobiliario y algunos enseres, me puse a revisar el archivo y a revisar si el equipo aún estaba trabajando bien. Ello me dio la oportunidad de observar nuevamente algunas películas clásicas, tales como el Doctor Strangelove, de Kubrick o College (El colegial, en donde Buster Keaton despliega su arte), en aquellas sobrias ediciones que editaba la Cinemateca Nacional de los años 90. Reproduzcamos aquí el texto incluido en el estuche.
Salud, lacl.
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Luis Buñuel. Sobre Buster Keaton y su film El colegial.
"...Aquí está Buster Keaton con su última y admirable película. College. Asepsia. Desinfección. Liberadas de la tradición, nuestras miradas se rejuvenecen en el mundo juvenil y temperado de Buster, gran especialista contra toda infección sentimental. La película resulta bella como cuarto de baño: con una vitalidad de Hispano. Buster jamás tratará de hacernos llorar, porque sabe que las lágrimas fáciles están periclitadas. Tampoco es, sin embargo, el payaso que nos hace reír a mandíbula batiente. Ni un instante dejaremos de reírnos, no de él, sino de nosotros mismos, con la sonrisa de la salud y la fuerza olímpica..."
El hombre se ha adiestrado a sí mismo en el arte de la quema, y ha tomado el gusto de reunirse en sectas de clowns para incendiar la obra. Nada quieren saber de fuego primordial. Mas sus sainetes algún día acabarán. El teatro se incendiará. La obra continuará.
Ella tiene veinte años matándolo. Conjuros, filtros, malevolencias. "Te vas a secar", le dice; "eso te lo garantizo". Y le hace llegar su sentencia de muerte cada vez que puede y por los más diversos medios.
El no le responde.
Sólo sonríe silenciosamente, mientras no se imagina nada ni a nadie que pueda mantenerse vívido y pleno de aguas fluyendo en sus cauces internos, luego de llegada la hora de expirar para desencarnar, pues para trascender también es preciso que nuestras aguas se evaporen, uno tiene que dejarlo todo; luego piensa en la ironía de las gentes que deambulan con el alma seca (en este paréntesis que llamamos vida) y que sólo respiran para alimentar el miasma que les habita. Han muerto antes de desencarnar.
Anselmo Di Testarutto, Apotegmas contra la peste. Turín, 1935.