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sábado, 29 de febrero de 2020

Guarida de los poetas. Del epistolario - Marina Tsvietáieva a Rainer Maria Rilke, Cartas del verano de 1926, fragmentos - Rilke a Tsvietáieva, 10 de Mayo, 1926, reproducción. / Poemas. Marina Tsvietáieva, A Boris Pasternak / MARINA TSVIETAIEVA, MI ESCRITORIO / BORIS PASTERNAK (Audio) / RILKE - ICH FÜRCHTE MICH SO VOR DER MENSCHEN WORT I DIE LIEBENDE


De nuestra muy apreciada edición de Siglo XXI Editores.
(Fue la primera edición en nuestra lengua, México, 1984)


Todo lo que diga o intente escribir sobre este cruce de palabras entre poetas de la talla de Marina, Rainer Maria o Boris, sinceramente lo digo, van a parecer algo baladí. Sírvame ello de excusa y sumarla al hecho de que, además, tengo demasiado tiempo intentando subir algunos fragmentos de ese libro maravilloso en el que se atesoran esas cartas, pero con el embarazo de no disponer de tiempo literal para sumergirme en un asunto al que, a pesar de todo, no le temo, como lo es el de agradecer lo agradecible. Ya será. Por los momentos, es más que suficiente poder contar con algunos segmentos espirituales y sensibles de esos tres agraciados seres, Marina, Boris y Rainer Maria.
Salud!

lacl

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Dentro de cincuenta años, cuando todo haya pasado, pasado del todo, cuando los cuerpos hayan quedado reducidos a polvo y la tinta haya palidecido, cuando el destinatario haya partido en busca del remitente, cuando las cartas de Rilke sean simplemente las cartas de Rilke, (...) cuando yo misma me haya diluido en el todo y - ¡ah, lo más importante!- cuando no necesite más de las cartas de Rilke, pues tendré a Rilke.



Marina Tsvietáieva


Marina Tsvietáieva a Rainer Maria Rilke

"...Espero sus libros como una tormenta que, quiéralo yo o no lo quiera, se desencadenará. Exactamente como una operación de corazón (¡no es metáfora!) cada poesía (tuya) se hunde en el corazón y lo corta a su manera, lo quiera yo o no lo quiera, pero, ¡cómo no quererlo! ¿Sabes por qué te digo Tú, y por qué te amo y…y…y? porque tú eres fuerza, lo más excepcional. Puedes no dar respuesta, yo sé lo que es el tiempo y sé lo que es la poesía. Sé, también, lo que es una carta. Sí. ¿Qué quiero de ti, Rainer? Nada. Todo. El permiso para elevar la mirada hacia ti cada instante de mi vida, como hacia la montaña que me protege (¡como si fueses un pétreo ángel de la guarda!). Mientras no te conocía podía hacerlo así, pero ahora necesito de tu consentimiento. Ya que mi alma es bien educada. Pero voy a escribirte, quiera o no. Te escribiré sobre tu Rusia (el ciclo «Los zares», etc.). Sobre muchas cosas. Tu letra en ruso. Emoción. Yo, que como un indio (¿o hindú?) nunca lloro, yo casi… leí tu carta a la orilla del océano, el océano la leyó conmigo, la leímos juntos. ¿No te molesta que él la haya leído? No habrá más lectores, soy demasiado celosa (celosa contigo). Aquí tienes mis libros —puedes no leerlos, ponlos en tu escritorio y créeme: antes de mi existencia no existían (en el mundo, por supuesto, no en el escritorio) —. Tu carta a Boris saldrá hoy mismo, registrada y confiada a la voluntad de los dioses. Rusia continúa siendo para mí algo así como el mundo del más allá..."



"…Rainer, quiero encontrarme contigo, (...) quiero dormir junto a ti, adormecerme y dormir. (...) Simplemente dormir. Y nada más. No, algo más: hundir la cabeza en tu hombro izquierdo y abandonar mi mano sobre tu hombro izquierdo, y nada más. No, algo más: aun en el sueño más profundo, saber que eres tú. Y más aún: oír el sonido de tu corazón. Y besarlo…"



"…ese país no existe. No sabría adónde volver. No puedo volver a una sigla, cuyo sentido no entiendo…"


Rainer Maria a Marina...






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De nuestra muy apreciada edición de Siglo XXI Editores.
(Fue la primera edición en nuestra lengua, México, 1984)



Marina Tsvietáieva     

A Boris Pasternak


Distancia: kilómetros y kilómetros?
Nos han dispersado, trasplantado
nos han ¡y qué bien estamos
en los lejanos horizontes!

Distancia y lejanías?
Des-pegados, des-soldados.
Apartaron manos, crucificaron
sin saber lo que destruían: la unión total.

De suspiros y tendones
nos malquistaron, nos esparcieron
y exfoliaron.
Muro y foso.
Separados, como las águilas.

Conspiradores y lejanías?
No nos desbarataron; nos perdieron
por los tugurios de las latitudes:
disgregados como huérfanos.

¿Cuál es, pero cuál es, marzo?
¡Como a las barajas nos han cortado!


(Traducción: Carlos Álvarez)








MARINA TSVIETAIEVA, MI ESCRITORIO  /  BORIS PASTERNAK (Audio)  /  RILKE - ICH FÜRCHTE MICH SO VOR DER MENSCHEN WORT I DIE LIEBENDE













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