jueves, 30 de noviembre de 2017

Coral / Boceto en cien palabras, lacl / Kurt Weill duo - Zuhälter Ballade / Ella Fitzgerald - I'm In The Mood For Love




Coral

La noche se disipa entre las luces de la urbe iluminada.

El neón palpita, sin diástole ni sístole, en el fondo de citadinas pupilas.

La vida corre, a veces impasible, a ratos desbordada, por sus inopinados y desatendidos recovecos.

Un hombre solo bajo un puente atisba la luna que solfea de otro reino.

Ella aflora entre las rendijas que dejan las siluetas de los edificios, como quien descorre una cortina o quita una máscara, develando la música de otro vivir latiendo allí, donde una sonrisa le retrata. 

Entonces reza a sottovoce: no estoy más solo que quienes ahora duermen…





(Kurt Weill) Tango Ballade



Ella Fitzgerald, I'm the mood for love




lunes, 27 de noviembre de 2017

Un día por la mañana, Vladimir Holan



Un día por la mañana, al abrir la puerta,
encontraste en el umbral los zapatos de baile.
Era para besarlos y tú lo hiciste enseguida
y volviste a sentir alegría después de tantos años,
todas las lágrimas largo tiempo contenidas
ascendieron a tu risa.
Luego te reíste y desde el alma rompiste a cantar
con la tranquilidad de la juventud...
No preguntaste qué hermosa
dejó los zapatos en el umbral.
Nunca lo averiguaste
y, sin embargo, de aquel feliz momento
aún vives con frecuencia...


Vladimir Holan. Traducción de Clara Janés





viernes, 24 de noviembre de 2017

Continuidad de la noche… Agradeciendo un adagio... Algunas melodías de Kurt Weill.



Esta tarde fui herido por ese dulce dardo, mínimo pero inmenso, apretado de Mery Sananes... Acto seguido, ipso facto, impulsado como por un resorte irresistible, salieron las líneas que agrego debajo de su conmovedor adagio. Acá los dejo en ofrenda.

Salud,
lacl


Continuidad de la noche…


Sol
luminosa continuidad
de la noche

Mery Sananes



El sol,
luminosidad continua
de la oquedad celeste,
le canta a la noche
en todos sus rezos.
Junta sus prismas
y le apuesta sus filtros,
para no cegarse
ante la atesorada oscuridad.
El baja la cerviz cada mañana
de su mañana perenne,
que sabe finita.
Y no se hace ilusiones
ni se torna altivo
(como sus adoradores terrestres)   
ante la sombra indescifrable
que, en otra mañana,
empapelada de azul oscurantina
le servirá de lecho
a sus postreros cantos.



lacl, 24 / 11 / 2017 


Dejamos algunas imágenes y enlaces musicales de 
la mano de Kurt Weill 

















miércoles, 22 de noviembre de 2017

Para celebrar la música y a sus músicos… Bach y sus pasiones: San Juan - San Mateo. / Contemplación.



Para celebrar la música y a sus músicos…


Una vez nos tocó, hace muchos, muchos años, tomar la carretera del parque Henry Pittier, rumbo a las arenas de Cata, en horas de la noche y en medio de una soledad absoluta. Derrotero que tomamos escuchando, primero, la Pasión según San Juan y, luego, la pasión según San Mateo. A medida que avanzábamos por esa selva encantada, más nos parecía que nos internábamos en una región insospechada de la noche... Como si no hubiese asfalto bajo las ruedas, ni siquiera trazos de carretera a los lados, ni mar al final de la jornada. Como si estuviésemos flotando en el aire y el paradero de nuestro deambular fuese un lugar jamás hollado por humano pie... Como era yo quien conducía, debía hacer todo lo dable por no dejar que mis sentidos dejaran de mantener el gobierno del automóvil, en medio del secuestro anímico de que éramos víctimas... Por fortuna ya era yo, para la fecha, un abnegado devoto de estas Pasiones, condición que me permitiría conservar algunos arrestos de temple, para seguir internándonos en el misterio que nos proponía la oquedad...

(lacl)


Bach - La pasión según San Juan 









Bach - La Pasión según San Mateo - Karl Richter




Contemplación







martes, 21 de noviembre de 2017

STURM UND DRANG – José Antonio Ramos Sucre, La torre de Timón / Shelley, Schiller, poemas...



Breve semblanza de Ramos Sucre sobre los orígenes del romanticismo y la función de la poesía. Apretada joya en la que evoca el derecho a una ciudadanía del mundo y la luz irradiadora que la poesía salva para el humanismo. Lucen lejanos esos tiempos mas, sin embargo, eso es el ayer.
Salud!
lacl

STURM UND DRANG – José Antonio Ramos Sucre, La torre de Timón


Carlyle eleva a Cromwell con su cortejo austero y fúnebre sobre los turbulentos regicidas del noventa y tres. Taine le objeta con acierto que el propósito de los segundos contrasta con la filantropía, con el motivo casi egoísta del puritano. Nuevos ideales habían ennoblecido durante el siglo XVIII el apasionado anhelo de reforma.

El esfuerzo generoso de la Revolución ocasiona el aserto muy socorrido y abundante de que la política desinteresada es prez singular de Francia con el mismo título y en la misma proporción que el talento discursivo, regular y consecuente. Ello es declarar por tenaz virtud de un pueblo lo que es apenas mérito y carácter exclusivo de cierta época inaudita. En la Europa sentimental de aquel siglo las personas cultas se preocupaban por la suerte del hombre, abstracto y universal, como que todas ejercitaban y honraban la razón, facultad propensa a omitir lo particular e individuante. En Alemania, semillero para entonces de filósofos distraídos y perplejos, abundaban naturalmente los weltbürger o ciudadanos del mundo. Los de Inglaterra aplaudían a la faz de un gobierno réprobo las victorias de Washington. Estaba de moda abstenerse del patriotismo, por mezquino, y oscilar entre la monarquía constitucional de Montesquieu y la república democrática de Rousseau.


Dos poetas, Schiller y Shelley, a mutua distancia de treinta años, albergan y retratan el sentimiento humanitario de aquellos días ardientes. Los dos descontentos, nebulosos y oratorios. Intrépidos heraldos, videntes irritados, bajo el cielo tormentoso y enigmático sostienen y vibran en la diestra un haz de rayos.








Goethe

miércoles, 15 de noviembre de 2017

Ching 38, Kuei: La Contraposición ¿Por qué afanarnos? - Astor Piazzolla, Romance Del Diablo - John Cage: Music of Changes (1951)




Ching 38
Kuei: La Contraposición
El Fuego
El Lago


¿Por qué afanarnos
en nuestros intentos de armonizar
entidades del mundo
que no guardan relación entre sí?
Pero cuando una creación no calza con otra,
aquella tampoco calzará con ésta.
El agua corre sobre la tierra,
baña las piedras,
humedece la arena,
baja por las rendijas
y así llegue al último peldaño
del olvido, del fuego o del inicio,
seguirá siendo agua en concierto
con los otros elementos.
La armonía está en el roce
de las cosas creadas
y en el lúdico retozo
entre las partes.
No podemos aspirar
a que el agua encarne
las virtudes del fuego
o que el fuego asuma
las virtudes del agua.
Pero, cuando por levante asoma,
tras el tul, la sonrisa de Selene
y, en la postrera semblanza del sol,
por poniente se despide
el llanto vivo de las rosas,
toda contraposición erige residencia.



lacl, 15 / 11 / 2017. Media tarde. Los conatos del verbo no tienen horario… Hace tiempo que no flirteábamos con el I Ching.




Astor Piazzolla, Romance Del Diablo





John Cage: Music of Changes (1951)



Ching 38, Kuei: La Contraposición ¿Por qué afanarnos? - Astor Piazzolla, Romance Del Diablo - La Cítara Guqin de China










Ching 38
Kuei: La Contraposición
El Fuego
El Lago

¿Por qué afanarnos
en nuestros intentos de armonizar
entidades del mundo
que no guardan relación entre sí?
Pero cuando una creación no calza con otra,
aquella tampoco calzará con ésta.
El agua corre sobre la tierra,
baña las piedras,
humedece la arena,
baja por las rendijas
y así llegue al último peldaño
del olvido, del fuego o del inicio,
seguirá siendo agua en concierto
con los otros elementos.
La armonía está en el roce
de las cosas creadas
y en el lúdico retozo
entre las partes.
No podemos aspirar
a que el agua encarne
las virtudes del fuego
o que el fuego asuma
las virtudes del agua.
Pero, cuando por levante asoma,
tras el tul, la sonrisa de Selene
y, en la postrera semblanza del sol,
por poniente se despide
el llanto vivo de las rosas,
toda contraposición erige residencia.


lacl, 15 / 11 / 2017. Media tarde. Los conatos del verbo no tienen horario… Hace tiempo que no flirteábamos con el I Ching.





Astor Piazzolla - Romance Del Diablo




La Cítara Guqin de China



lunes, 6 de noviembre de 2017

Tom Waits, la música como una puesta en escena.



 A Sebastián, mi hijo, que como todo ser 
 humano que no le niega agua al corazón, 
 ha sabido lo que es la misteriosa sed.



Mi amigo Chacho Cabrera lo ha llamado el Mozart de nuestra era. Tom Waits es un músico prácticamente inclasificable. Yo diría que concibe la música como una puesta en escena en la que la poesía es telón de fondo, hormigueo subiendo desde el tablado de tal puesta en escena, danza colorida de imágenes flotando en el aire que se abre a la propuesta auditiva y recorre los espacios del templo que es la escucha. Figurémonos esa escucha como como encarnada en un viejo teatro en el que los ambientes cantan entre sí (bastidores, pasillos, trastiendas, galerías, tramoyas) en lo que suponemos es silencio, pero ese silencio es una caja de resonancias, maestra en el arte del bis. Y cuando himnos como éste que colgamos en primer lugar, se abren espacios en ese templo de la escucha, entonces, la caja de resonancias queda feliz de por vida, aun a expensas del olvido, pues vive de los acordes que en ella han quedado alojados.

Tom Waits ha lidiado, además de con sus propios versos, con los de poetas de la Generación Beat. Aquí dejamos esta pequeña pieza que no porque sea acrisolada miniatura deja de ser joya. Es  un himno para los días que han pasado, para los días que vendrán. La guitarra tiene la virtud de que pareciera quedarse siempre detenida en el mismo punto, debido a ese rasgueo insistente al final de cada acorde. Y sin embargo se mueve, ese sonido hace los efectos de un badajo en el que la campana es nuestro pecho...

Tom Waits - I Hope That I Don't Fall in Love with You

Well I hope that I don't fall in love with you
'Cause falling in love just makes me blue,
Well the music plays and you display your heart for me to see,
I had a beer and now I hear you calling out for me
And I hope that I don't fall in love with you.
Well the room is crowded, there's people everywhere
And I wonder, should I offer you a chair?
Well if you sit down with this old clown, take that frown and break it,
Before the evening's gone away, I think that we could make it,
And I hope that I don't fall in love with you.
I can see that you are lonesome just like me, and it being late,
You'd like some some company,
Well I've had two, I look at you, and you look back at me,
The guy you're with has up and split, the chair next to you's free,
And I hope that you don't fall in love with me.
And I hope that you don't fall in love with me.
Now it's closing time, the music's fading out
Last call for drinks, I'll have another stout.
Turn around to look at you, you're nowhere to be found,
I search the place for your lost face, guess I'll have another round

And I think that I just fell in love with you.












sábado, 4 de noviembre de 2017

Llego a la casa con espíritu de juego, conversa entre poetas... Gunnar Ekelöf y Konstantin Kavafis / Carlos Sánchez Vegas. Diario de Viaje. Oficio de librero.




Llego a la casa con espíritu de juego. Han de ser los coloridos y sensuales trazos que hoy Carlos Sánchez Vegas nos ha dado a contemplar. Estuve enquistado en sus cuadernos. 

Lo primero que me nace es tomar dos libros de dos poetas queridos. Abro cada uno al azar. No los leo. Los caso. Libro abierto contra libro abierto para sellar el casamiento. Abanico con abanico. Los dejo conversando. Cumplo algunas rutinas. Nada de enigma. Las rutinas que cumple todo ser al llegar a su madriguera. Me bebo un par de vasos de agua tocados por unas caricias de bicarbonato sódico bien diluidas al amor del agua. Ese polvo tiene la virtud de domar el fuego. Vuelvo al campo de juego. 

Entre tanto se han entretenido, me parece, aunque sus voces puedan lucir algo disímiles acá arriba.

Konstantin le ha dicho a Gunnar:

Mar de la mañana

Que me detenga Aquí. Que también yo contemple
por un momento la naturaleza.
Del mar en la mañana y del cielo sin límites
el luminoso azul, la amarilla ribera: estancia
hermosa y grande de la luz.
Que me detenga aquí. Déjenme creer que veo esto
(aunque ciertamente lo vi por un instante cuando me detuve);
y no ahora mis sueños,
mi memoria, la rediviva imagen del placer.

Y luego Gunnar le ora a Konstantin

Cabeza de serpiente

En otoño o en primavera -
¿Qué importa?
En la juventud o en la vejez –
¿Qué más da?
De todas maneras desaparecerás
en la imagen de la Totalidad
Tú desapareciste, has desaparecido
ahora, hace un instante
o hace mil años
Pero tu desaparición
persiste


Gunnar Ekelöf y Konstantin Kavafis en casual conversa…









Carlos Sánchez Vegas. Diario de Viaje. Oficio de librero.